“Con lo que me paga Fort compro dos departamentos”

El Intruso tiene un personaje picaresco y querible. Casi en el borde del escenario interpreta a un coreógrafo afeminado y es todo una risa.
 
- ¿Qué personaje que te tocó...?
- Creo que la gente estaba esperando saber qué tan trolo salía Ventura (risas). Es un personaje que lo hago con encanto, me entrego totalmente. Hago de un coreógrafo algo pasado de moda, muy afeminado, pero con el cual la gente se divierte.
 
- Sos la persona más seria dentro de Intrusos y acá derrapaste...
- Es el otro lado de la persona, es el grotesco, digamos es el otro polo. 
 
- Ventura tiene unos latigillos dentro de la obra los que le dieron más de un dolor de cabeza.
- Memorizar eso de "Piso cucaracha y saludo al sol" me costó mucho y luego coordinar eso con lo que tengo que bailar en la obra me costó el doble, así que imaginate lo que tuve que hacer. Salí de licencia para memorizar todo mi libreto. Pero esto es un logro de Cosentino, el director y también modificaciones de Ricardo y se trabaja en equipo, como en un equipo de fútbol. 
 
- Es una obra con muchos personajes...
- Es una obra en la que participan 17 personas y en un lugar muy reducido. En bambalinas nos tenemos que cambiar y compartir lugar con la escenografía y los técnicos y no es fácil, falta luz atrás del escenario y casi no veo, tal es así que cuando salía me llevé de frente una escalera y me senté de culo allá abajo. Pero bueno, tenemos oficio y salimos al toro.
 
- ¿Cómo está tu relación con Jorge Rial después de los enfrentamientos que tuvieron por Ricardo Fort?
- Es un tema superado, siempre hubo la mejor y con Rial tengo más que buena onda, es como todo matrimonio, siempre hay una peleíta para acordarnos de que somos distintos, pero siempre tenemos la mejor y eso se nota en la tele. Además, Jorge es el hermano de mi vida. 
 
- Luis tienes una revista, un programa de televisión, estás en Carlos Paz, ¿era necesario también hacer Mar del Plata?
- Sí, si consideras que Ricardo me paga muy muy bien, tanto como para comprarme dos departamentos en barrio Norte. Es por dinero, simple y llanamente eso. Yo estaba con un pie en el avión, me estaba yendo a Uruguay y me llamó Fort, me propuso hacer esto y las condiciones eran inigualables, así que estamos aquí. Es lo que uno hace y si encima te pagan bien y no tenés que salir a robar hay que hacerlo, boludo sería si me niego.

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