Los inexplicables de los premios Martín Fierro 2013
La entrega de los Martín Fierro 2013, esta vez en el tradicional Teatro Colón, fue muy distinta a otras ediciones por distintos aspectos.
Nieves Otero
@nieves_otero
Sofía Tarruella
@sofisuu
La entrega de los Martín Fierro 2013, esta vez en el tradicional Teatro Colón, fue muy distinta a otras ediciones por distintos aspectos.
Además de algunos looks inapropiados por parte de los artistas, "perlitas" inesperadas, la noche estuve colmada de situaciones que no entendemos porqué sucedieron.
Los inexplicables de la noche:
-Ceremonia "Light": La falta de comida y de bebidas alcohólicas tanto los famosos, como para los trabajadores de prensa que se encontraban cubriendo el evento, fue uno de los grandes temas de la noche.
Está bien que en éste tipo de eventos las famosas no suelen comer para que les entre el vestido y tener cintura de avispa, pero ¿Qué necesidad tiene la organización de hacer morir a la gente de hambre? La entrega, sin contar la alfombra roja, duró cuatro horas aproximadamente y en plena hora de la cena... lo cual hace lógica la queja.
Por otro lado, sin alcohol, ¿hubo menos pasión? Con las bebidas espirituosas, los famosos se desinhiben, hablan más y se muestran tal cual son. Sino recordemos aquella mítica "alegría" de Soledad Silveyra en alguna entrega anterior.
-La alfombra roja de la desorganización: la cobertura de la llegada de los famosos se convirtió en una Misión Imposible. Unas pocas tarimas para cientos de fotógrafos y periodistas hambrientos por una nota, no es suficiente. Como si eso fuera poco, gente del público comenzó a colarse en el sector que la prensa tenía asignado en la alfombra roja y los empujones ganaron la noche.
-Contra las pieles ¿de las famosas?: los activistas a favor de la protección de los animales y en contra del uso de abrigos de piel estuvieron presentes todo el tiempo y aunque casi no había mujeres con tapados de este tipo, ellos se hicieron notar.
A los gritos y con pancartas, los activistas presenciaron la alfombra roja y luego, esperaron a los famosos en la puerta. Sin ir más lejos, uno de ellos se acercó a Susana Giménez para pedirle que no use pieles, y la diva dijo que los apoyaba.
-El disfraz de Violetta: La vincha de colores, la trikini blanca con capa multicolor y el reloj deportivo blanco de Martina Stoessel es una de las grandes incógnitas de la noche. ¿Qué estaba pensado la joven actriz cuando decidió lucir en la noche de gala esta versión moderna de "She-ra, la princesa del poder"?
-La mujer que recibió el premio en nombre de Mónica Cahen D'Anvers, que nadie conocía y que agradeció en francés: la periodista de "La mañana con Mónica y Cesar"por Radio AM Del Plata fue la ganadora del premio a mejor labor femenina en radio pero en su lugar, subió a recibir el premio la locutora del programa, Belén Badía.
"Obviamente no soy Mónica", comenzó diciendo Badía y enseguida contó que la consagrada periodista "es la razón por la cual" ella estudió "francés toda su vida" e inmediatamente y ante la mirada atónica de los expectantes terminó, el discurso en dicho idioma.
-Premios grabados cual fiesta de 15: los ganadores que fueron grabados, ¿son como los invitados al casamiento después de las 12?
Dijeron que iban a grabar algunas ternas para no hacer tan extensa la entrega, sin embargo lo fue igual. Pero, ¿cuál es el criterio para decir qué premios deben ir grabados y cuáles en vivo? Como en los casamientos hay invitados "de segunda" que van después de las 12, en los Martín Fierro ¿Hay premios de segunda?
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